SHAD, marca referente en Europa en la industria del motor en las últimas décadas, basa su exitosa trayectoria en la inversión en I+D y la protección de sus intangibles de propiedad industrial. Así lo demuestran sus 34 patentes y modelos de utilidad en vigor y sus casi 20 diseños protegidos, a nombre de NAD, S.L., empresa de la cual podéis conocer más en la entrevista publicada en La Vanguardia.
Entrevistamos en esta ocasión a Carolina Gómez y Pere Ayala, Manager Design y R+D Technical Director, respectivamente.
SHAD cuenta ya con más de 30 años de historia. ¿Cómo consideráis que ha evolucionado el diseño en vuestro sector desde sus inicios?
El sector de las motos ha tenido una gran evolución a lo largo de los años: tecnología, electrónica, materiales, peso, aerodinámica, ergonomía… todo ello ha contribuido a un aumento considerable en su seguridad y confort. Muchas marcas han puesto al usuario en el centro, lo que ha permitido lanzar grandes productos que dan una respuesta a necesidades y deseos de usuarios urbanos que solo usan sus motos para ir a su lugar de trabajo, moteros que realizan largos desplazamientos, los que buscan adrenalina en rutas alternativas a la carretera, etc.
En SHAD, como marca creadora de accesorios para motos, estamos atentos a hacer una lectura de esta evolución del sector, de cambios en el consumo, de nuevas tendencias que se van creando o consolidando. Intentamos analizar usuarios de los diferentes segmentos. Mientras más los conocemos, más relevantes podemos ser en los productos que lanzamos al mercado.
¿Qué papel ha jugado el diseño en la consolidación de la marca SHAD?
Es fundamental. El diseño está presente en las diferentes etapas de desarrollo de un producto desde el inicio, que es cuando se plantea la necesidad de un nuevo producto, la definición de especificaciones, diseño, prototipaje, desarrollo e incluso en cómo comunicamos las características del producto al mercado.
Para nosotros el diseño es estratégico, y el estar presente en más de 80 países, el haber ganado numerosos premios de diseño como Red Dot Award, IF Award, German Design Award o el ABC Mobility, o el trabajar desarrollando maletas para las principales empresas de motos del mundo, nos indica que vamos por buen camino.
Según vuestra experiencia, ¿en qué os ha ayudado proteger vuestros diseños?
Nos ayuda a rentabilizar toda la inversión realizada en I+D, protegiendo los diferentes mercados durante un largo periodo de tiempo, aportando exclusividad. La inversión en I+D nos ayuda a aportar un diferencial en la experiencia de usuario. Para que el precio no sea el único argumento en el momento de elegir un producto u otro y pueda valorarse exclusividad, diseño, funcionalidad, calidad y excelencia.
¿Cómo puede reconocerse un producto SHAD? ¿Cuál es el denominador común de vuestros productos?
Nos reconocemos por productos fiables, de buena calidad, muy funcionales. Nuestros productos de equipaje plásticos, de aluminio o textil, buscan tener diseños sobrios, que acompañen a la moto. Para el motorista, la estética de la moto está por encima del diseño de la maleta.
También buscamos que un producto pueda adaptarse a numerosas marcas y modelos de moto del mercado.
¿Qué nuevos proyectos tenéis? ¿Tenéis nuevos lanzamientos a la vista?
2024 es un gran año en lanzamientos de productos SHAD. En el mes de noviembre, en la feria italiana EICMA 2023, presentaremos una nueva maleta expandible lateral. Esto nos ayuda a reforzar a SHAD como pioneros y líderes en esta tipología de maletas.
Presentaremos también nuevas bolsas de depósito Click System, y laterales y una bolsa de depósito de la gama de aventura TERRA.
Y, por último, este año en la feria de Eurobike 2023 en Frankfurt, después de casi 3 años de preparación, lanzamos nuestra nueva división de negocio: SHAD BIKES. Principalmente, son piezas de equipaje urbano para personas que se desplazan por la ciudad, todas pueden ensamblarse a las bicicletas, pero además tienen un diseño que permite que sean mochilas, bandoleras, maletines, alforjas… Todas ellas pensadas para usar durante todo el día, incluso si se hace uso de diferentes medios de transporte.
Tenemos 4 familias de productos, que buscarán llegar a 4 tipos de segmentos de usuarios urbanos diferentes (Shad Bikes – Urban bags for city bikers).
¿Los habéis protegido? ¿Cómo?
Sí, muchos de los productos tienen registro de diseño y patentes.
¿Podrías definir el proceso de creación y lanzamiento de un producto? ¿En qué lugar se sitúa la protección y registro de intangibles en ese proceso?
De forma muy esquemática, podríamos resumir nuestra metodología de diseño en las siguientes etapas: investigación de usuario y mercado, proceso de diseño, prototipaje (que incluye pruebas de laboratorio, de ruta y mucha iteración), desarrollo e implementación.
Hay algunos productos que son una evolución de uno de nuestros productos, o una innovación exponencial. Hay otros productos que requieren un gran esfuerzo en la etapa de investigación para conocer y analizar tendencias del mercado y posibles segmentos del mercado al que podríamos dirigirnos. Ejemplos de ello son la línea de aventura TERRA o la definición de la línea de negocio SHAD BIKES.
La protección y registro de intangibles se realiza durante la etapa de desarrollo e implementación.
¿Consideráis que la cultura de proteger y valorar el diseño industrial está suficientemente implantada por parte de las empresas catalanas/españolas?
Creo que no, y esto se puede deber a que las empresas que conforman nuestro tejido industrial principalmente son pymes. En muchas empresas el diseño no es un activo estratégico, en otras hay diseñadores, pero el diseño no se gestiona como un recurso que puede aportar rentabilidad y crecimiento a la empresa.
Falta más información en cuanto a la implementación de diseño en una empresa, más acompañamiento, más datos que ayuden a generar confianza, más inversión en proteger diseño, proteger marca, etc. Patentar mecanismos realmente es una inversión.
«El viaje imaginario de SHAD», el proyecto de acción social
A parte de su éxito comercial, SHAD busca generar un impacto social y ser un altavoz al talento de personas neurodiversas o con discapacidad motriz. Desde el 2020 se están creando talleres y prácticas empresariales de 180 horas con el alumnado del programa en Arts Gràfiques del Centro de Educación Especial PONT DEL DRAGÓ.
El Viatge Imaginari de SHAD, es una recopilación de maletas para moto o bicicleta intervenidos desde la creatividad y sobre todo desde la diversidad, que responden a la pregunta: si pudieras viajar en una moto o una bicicleta equipadas con maletas SHAD cargadas de magia y de sueños, ¿dónde irías?
Las respuestas, creativas, talentosas y originales, conforman esta exposición realizada como parte del evento Barcelona New Economy Week (BNEW) 2023, y que contó con el respaldo del Barcelona Centre de Disseny (BCD).